Durantel el embarazo, los cambios que experimentamos suelen llamarnos mucho la atención, sobre todo siendo mamás primerizas. En las últimas semanas el cuerpo empieza a preparase para el momento del parto y surgen nuevas sensaciones y síntomas que nos ayudan a determinar cuándo se producirá. Toma nota de las siguientes señales para saber si se acerca el día del parto: Baja la barriga Cuando se acerca la fecha esperada, el bebé encaja su cabeza en la pelvis y desciende, por lo que, a simple vista, se podrá ver cómo la barriga de la mamá está más baja. Notarás también que respiras mejor y haces mejor la digestión. Calambres musculares El peso del bebé añadido sobre la pelvis en las últimas semanas acrecienta los calambres en las piernas y otros dolores a causa de la presión. Necesitas ir al baño constantemente Hacia el final del embarazo la vejiga no tiene apenas espacio para distenderse, por lo que es normal que sientas la necesidad de ir al baño cada dos por tres, y por cantidades muy pequeñas. Dolor en la espalda o en la pelvis Puedes sentir dolor en el bajo vientre o dolores puntuales en la zona abdominal y confundirlo con una contracción. No te preocupes, si son puntuales y se pasan es porque el bebé está ejerciendo algo de presión, pero aún no es tiempo de salir. Las contracciones de parto Cuando te pones de parto verás que las contracciones se hacen más recuentes de forma constante: cada 20 minutos, luego cada 15, cada 10…. En cambio, hay veces que aparecen contracciones discontinuas: cada 12 minutos, luego 7 minutos, etc. En estos casos puede ser una “falsa alarma”. También te puede interesar: Beneficios de la música durante el trabajo de parto Ante cualquier síntoma que te resulte anómalo, o si tienes cualquier duda, contacta con tu ginecólogo de confianza en Castellón para cerciorarte de que todo está bien. En el Centro Médico Dr Herraiz estaremos encantados de atenderte y cuidarte durante todo el embarazo y el parto, para que vivas este momento tan dulce con mayor tranquilidad y confianza.
Inducción al parto: cuáles son los motivos más frecuentes
Algunas veces es necesario poner fin al proceso de gestación, bien por motivos médicos o personales. Este procedimiento desencadena contracciones uterinas para que pueda nacer el bebé. Se trada de la inducción al parto. Aunque siempre es preferible que éste inicie de forma natural, no siempre es posible. Por eso, y especialmente cuando está en riesgo la continuación del embarazo o éste supone algún riesgo para el bebé o para su madre, es necesario actuar. ¿Cuándo es indicada la inducción al parto? La respuesta es: cuando los beneficios de esta decisión sean mayores para la madre y el bebé que dejar que el embarazo continúe. Por supuesto, siempre hay que tener en cuenta si existen contraindicaciones y si se dan las condiciones adecuadas. Los motivos más habituales por los que se suele inducir el parto son: Complicaciones médicas y del embarazo. Rotura prematura de las membranas sin que inicie el parto en un periodo de 24 horas Infecciones o muerte fetal Sospecha de riesgo fetal por problemas del embarazo Cuando el embarazo se prolonga demasiado (más allá de las 41-42 semanas de gestación) En algunos casos, cuando se trata de una situación de emergencia, no hay tiempo para la inducción al parto y el embarazo debe terminarse lo antes posible con una cesárea. La inducción al parto y sus riesgos Por lo general la inducción del parto es un procedimiento seguro, si bien puede conllevar ciertos riesgos para la madre y el bebé que conviene tener siempre presentes. El parto inducido suele tener una duración mayor, por lo que aumenta la posibilidad de finalizar el parto por cesárea o de un mayor uso de anestesia epidural. También pueden producirse hospitalizaciones más largas de lo habitual y hemorragias postparto. Por todo ello la inducción electiva, por conveniencia personal, no debe tomarse a la ligera. Es importante, en definitiva, evular de forma cuidadosa el balance de riesgos y beneficios que puede ocasionar una estimulación al parto y seguir siempre el consejo de tu médico de confianza.